(Por Gabriel Moto Nsa, Secretario de Organización del Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial)
Acabo de regresar de Madrid, con motivo de la celebración del cuarenta aniversario de la fundación del Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial. En primer lugar, dedico un recuerdo emocionado a todos los amigos y simpatizantes del Partido que nos han dejado por muertes naturales o asesinatos y palizas.
Recuerdo en este momento a mi compañero de fatigas, el doctor don Amalio Buaki que hace poco se fue para seguir rezando con nosotros desde el cielo. Mis recuerdos también a Lorenzo Bacale, a Patricio Nsue y a Regina Mañe. Con estos nombres, quiero recordar a todos los demás, a los que tenemos en el recuerdo.
Cuanto más tiempo va pasando, cada vez estoy convencido de que este Partido, llamado Partido del Progreso, tiene su razón de ser, es necesario para Guinea Ecuatorial. Existen gestas y batallas que no se ganan en un solo día; porque necesitan del esfuerzo de varias generaciones para dar contenido y significado al esfuerzo de todos. A lo mejor el esfuerzo de un solo día no es tan concluyente como la cantidad de sudor y lágrimas derramadas por una generación tras otra y sin ver frutos positivos tras este esfuerzo tan ímprobo.
Las divisiones internas, desconfianzas, provocaciones; no son suficientes para romper esta raíz tan bien plantada y que se va germinando poco a poco, no al ritmo que nosotros quisiéramos sino al ritmo de los acontecimientos mundiales. Si el papel de nuestra libertad se encuentra en un gran montón sobre una mesa, en donde se hallan muchas más solicitudes de libertad; hay que esperar que nuestra instancia o solicitud, se ponga en primer lugar y así nos puedan escuchar, los que rigen los destinos del mundo.
Nuestra liberación no la podemos conseguir sin el pueblo a quien queremos representar, pero tampoco solo con el esfuerzo de una población un poco aletargada por los dirigentes que rigen nuestros destinos.
Después de la celebración del 40 aniversario, todavía creo más en nuestra gente, en nuestra razón de ser, y estoy convencido que nuestros objetivos se conseguirán tarde o temprano. Tenemos equipo, tenemos ideología, tenemos líder, tenemos implantación y, -¿por qué no decirlo?-, tenemos las ideas claras. Al recibir los mensajes de felicitación de nuestros compañeros de Guinea Ecuatorial y de los Estados Unidos, nos damos cuenta de que ellos tampoco se rinden y que siguen llevando el Partido en el corazón. El Partido que fundó Severo Moto, es un Partido serio. No solo lo decimos nosotros, sino también nuestros competidores.
Formamos un equipo luchador y aunque haya algunas fugas y pérdidas de confianza en algunas personas, la idea fundamental está a la vista de todos. Solo tenemos un enemigo común y la lucha debe ser mancomunada para derrumbar la dictadura. El Partido no quiere gobernar el reino de España, ni siquiera una comunidad autónoma española por importante que sea. Queremos regresar a nuestro país y demostrar a los tiranos que existe otra forma de gobernar que es la que pone en el primer lugar a las personas.
Severo Moto, como líder fundador del Partido del Progreso, cuenta con mi apoyo y el de todo su equipo. No cuenta con los que vienen a enredar, o representan intereses espurios. Hay un proyecto, hay un líder. Dejemos de preocuparnos y ayudemos a que nuestros deseos y anhelos se hagan realidad. Me encanta que la familia del presidente le siga acompañando en todos los momentos. No hay proyecto que valga la pena sin la participación de tu familia. Son los primeros que deben creer en ti para que los demás se acerquen.
Pero también he notado que sigue habiendo unas ganas enormes de abrir las puertas para todo el que quiera participar en este proyecto ilusionante; Políticos, audistas, activistas, busquemos la forma de acercarnos más, olvidemos las diferencias y hagamos una llamada general a todos para participar en un encuentro por guinea y para Guinea. Vale la pena de que acudamos a este encuentro sin condiciones previas. Pongamos las condiciones para avanzar cuando estemos todos juntos sentados en la mesa.
Por todo ello, creo que, tras 40 años, si el Partido del Progreso no existiera, habría que inventarlo. Es super necesario. Por consiguiente, Severo Moto, lo tuyo no fue un error, al contrario, fue un acierto para el bien de todos los guineanos; una verdadera necesidad. Si no, el tiempo dará y quitará razones. Felicitémonos mutuamente y deseemos larga vida y muchos éxitos al Partido del Progreso. SÍGUENOS.